domingo, 4 de octubre de 2009

La elección de la sede Olímpica del 2016 se decidía en Copenhague, la capital de Dinamarca y en esta ciudad está la famosa Sirenita, protagonista de los cuentos de Hans Cristian Andersen. La pequeña sirena, que soñaba con ver el mundo de los humanos y poder contemplar el azul del cielo. Tiene un semblante triste y a veces se encuentra muy sola a la orilla del mar. La sirenita harta de tanta soledad y del cielo plomizo de Copenhague, se ha decidido por la candidatura de Rio de Janeiro como la sede de las Olimpiadas del 2016. Pensó que venirse para Madrid, tampoco era una mala idea en lo tocante a la climatologia.....pero con la que esta cayendo en lo economico y en desempleo, se ha decantado por el exotismo de Brasil y aprender a mover la cola a ritmo de samba. La numerosa delegación española, encabezada por el rey Don Juan Carlos "el Barbón", que llegó a Copenhague con una corazonada.... salió con un chasco de tres pares de cojones!!!. Se habrá de cambiar la estrategia de "Tengo una corazonada" por "Tengo una cabezonada".
A los que les gustaria ir a Rio, es a los millones de chinos hartos de la Revolucion Cultural y de las imposiciones y dogmas marcadas por el lider revolucionario Mao Tse-Tung en el Libro Rojo. Tampoco les importaria, el irse para Madrid a montar un restaurante o una tienda de todo a un euro. Al igual que ya hicieran el año pasado durante los Juegos Olímpicos de Pekín, el régimen mostró al mundo su imparable ascenso con un espectacular desfile, donde en lugar de atletas y malavaristas y mosaicos de colorines, sacó a relucir todo su potencial militar desarrollado por los 30 años de crecimiento económico del «capitalismo rojo».La plaza Tiananmen se lleno otra vez de tanques. Esta vez no fué para aplastar ninguna revuelta de estudiantes......celebraban la conmemoración del 60 Aniversario de la Republica Popular China(1949-2009). Advertidos por la Policía, la mayoría de los pequineses no salieron de sus casas y vieron el desfile por televisión.De esta manera se evitan posibles problemas. Una fiesta por y para el pueblo, pero sin el pueblo.
Fernando Marin (director de la Gazetilla que trabaja como un chino y con Rumbo a Rio, como la Marisol)